jueves, 18 de agosto de 2011


Nosotros, los 12 discípulos del misterio,
escribimos este libro en tu ausencia. Ven,
necesitamos de tu escritura, creación de
tu mente. Mantra sobre este papel de tierra.
Ven, escritor y brujo. Precisamos de tus
ojos entre las letras. No ves lo que estamos
creando? No quieres acaso tu también el
nacimiento del Nuevo Hijo? Ven. Las palabras
ya no alcanzan para escribir la Historia del
Mundo. Las manos del séptimo vidente están
intactas y sobre la mesa en la que hemos
comido, jugado y hecho el amor. Los trece.
Estamos sedientos de él. Lo contemplamos.
Ven a nacer discípulo y vidente del Próximo
Calendario. Allí no habrá horas ni meses.
Solo lunas y siembras. Allí no habrá el
tiempo para sumergirse en la añoranza.
Allí solo habrá el cuerpo prolongado. Un
ADN gigante. Una luz impronunciable.